Le Pongo los Cuernos a Mi Esposo con Mi Vecino Negro Súper Dotado (Spanish)

Cuando me case con Mario, jamás pensé que le estaría metiendo los cuernos, ¡mucho menos cuando hace apenas unas semanas que nos volvimos marido y mujer! No es que yo sea infiel, no está en mi naturaleza, pero no estaba lista para nuestro vecino, un guapo hombre negro con un cuerpo de gimnasio ¡y una verga descomunal! Varias veces lo note mirándome mientras me ejercito, regreso de una caminata o simplemente me distraigo en el balcón. Debo confesar que me gustaba, y me encontré masturbándome a solas fantaseando con su verga negra. Nuestro primer encuentro fue el día que le pedí que me ayude con unas bolsas del mercado. Mi esposo estaba trabajando y fue inevitable. Termine de rodillas, comiéndome esa morcilla negra hasta sentir que se corría en mi boca y la llenaba de semen caliente y espeso. Me volví adicta a esa leche y a esa tranca de ébano y quería más. Nuestro segundo encuentro fue en s casa, y no resistí la tentación de montarme sobre su erección y sentirla dentro de mí. Usamos condón y se vino en mis tetas, pero yo quería más. Necesitaba sentir esa corrida dentro de mí, sin importar las consecuencias. Aprovechando un viaje de trabajo de mi esposo, mi amante negro y yo fuimos a un hotel cercano donde me follo la boca, el coño y el ano sin parar con su matraca, dura como una espada. Tal como soñé, se vino dentro de mí. Su semen chorreando entre los labios de mi vagina y resbalando por mis muslos, ¡que delicia!